jueves, 24 de julio de 2014

El objetivo del 8% de renovables para 2016, al alcance de Argentina

Todos los inconvenientes de los combustibles fósiles (abultados presupuestos de importación, contaminación, recurso limitado...) se convierten en ventajas por parte de las fuentes de energía renovables. En este sentido, el Senado presentó hace unas semanas el informe “Energías Renovables: ¿Por qué debería ser prioritario cumplir el objetivo del 8% al 2016.
Energias renovables eolicaSe trata de un libro, fruto de la colaboración del sector público, privado y de organizaciones de la sociedad civil, que gira en torno al escenario que dibuja ante la Argentina la ley 26.190 Régimen de Fomento Nacional para el uso de fuentes renovables de energía destinada a la producción de energía eléctrica, en virtud de la cual hacia el 2016 el 8% del consumo total de energía debería proceder de energías renovables.
En la actualidad, el aporte renovable es del 1,4%, es decir, unos 1.700 GWh. Entre estas fuentes sustentables no sólo hablamos de las energías solar (la que más expectativas despierta en el corto plazo), hidráulica o eólica, que son las que primero vienen a la mente, sino también de la biomasa, el biogás de diferentes orígenes, la geotérmica y la mareomotriz.
Todas ellas cuentan con el denominador común de que tienen un potencial de uso infinito y, desde un punto de vista ambiental, tienen cero o muy bajas emisiones de gases de efecto invernadero en su ciclo de vida, lo que sin duda contribuye a mitigar el cambio climático. A ello se suma, además, que no producen ningún tipo de residuos tóxicos o peligrosos.
Las cifras hablan por sí solas: de alcanzarse el objetivo, nos situaríamos en una producción de energía cercana a los 11.800 GWh y una reducción de emisiones de CO2 de más de 5 millones de toneladas. También supondría evitar quemar 6,6 MMm3 al día de gas natural o, lo que es lo mismo, el17% de la demanda de gas para generación utilizada en 2012.
No se pueden olvidar tampoco las inversiones que pueden atraer, puesto que sólo en lo que a energía eólica se refiere podríamos hablar de una inversión en el orden de los 6.600 millones de dólares; así como del empleo (en todo el mundo las renovables emplearon en 2010 a 3,5 millones de personas).
Brasil puede ser un buen espejo en el mirarse, puesto que ya dispone de 730.000 empleos vinculados a los biocombustibles, así como otros 14.000 empleos en la industria eólica, que ya genera 2.500 MW.
Sin embargo, tal y como subraya el informe, para conseguir la meta del 8% en 2016 es necesario establecer y ejecutar políticas claras y decididas por parte del Estado Nacional, además de una capacitación y concientización en la materia. Así, por ejemplo, resulta crucial una mayor comprensión de los impactos de la biomasa (otra con muchas expectativas) para el caso de un uso masivo de los insumos bio-energéticos. Un futuro mejor es posible y podemos comenzar a construirlo desde este mismo instante.
Fuentes: Evwind | Cader Energías renovables | Flickr

Huertos verticales. La revolución de las lechugas colgantes

Los jardines verticales llegaron a nuestras vidas hace ya algunos años, con el que se levanta en el edificio de Caixa  Fórum en Madrid como uno de sus máximos exponentes en España. Poco a poco se fueron adentrando en nuestros hogares y se convirtieron en un elemento más de decoración de interior.
Ahora, toca dar una nueva vuelta de tuerca e ir mucho más allá del cultivo de musgos, líquenes y plantas estabilizadas con las que arrancaron este tipo de composiciones. ¿Por qué no plantar huertos verticales? ¿Acaso no se cultivaban patatas en las macetas de geranios durante los años de la posguerra?
Los huertos verticales se han convertido en la respuesta para aquellosurbanitas que echan de menos su relación con la tierra y apenas tienen espacio en los apartamentos, cada vez más pequeños.
Ya hay disponibles en el mercado macetas específicas para estas composiciones, pero es preferible dar rienda suelta a tu creatividad y, de paso, ahorrar unos cuantos euros: se pueden utilizar materiales reciclados, como botellas de plástico –preferiblemente de color para proteger a la planta de la radiación solar-, tetrabriks o cubos de pintura, por ejemplo, cortando uno de sus extremos y apilándolos formando una columna.
En cada una de las botellas es necesario abrir una pequeña ventana, de unos seis por seis centímetros, por donde saldrán las hojas de nuestra planta en caso de que tenga parte aérea y no se trate de un tubérculo. Cuando esté levantada nuestra columna, la regaremos siempre desde arriba, anegando el primero de nuestros recipientes pues desde allí irá discurriendo el agua al resto del huerto.
¿Pero con qué empezamos? Sé cuidadoso con la selección de lo que quieras cultivar, pues no todo prosperará de la misma manera. Lo más recomendable para este tipo de espacios -sobre todo para iniciarse en este mundillo-  son las verduras de hoja verde como la lechuga, la escarola y las espinacas. Aunque si eres un auténtico zote con las plantas y quieres ir muy poco a poco, lo más apropiado para ti son las hierbas aromáticas o medicinales, como la hierbabuena, cilantro, la menta o el tomillo, porque son mucho más resistentes. Otros, como las zanahorias, las remolachas y otros tubérculos requieren algo más de espacio.
Y si el problema es que ni siquiera tienes espacio para las macetas, no te preocupes, que siempre podrás recurrir a los huertos hidropónicos, es decir, aquellos basados en el cultivo de plantas en soluciones acuosas con algún soporte de arena, grava, etc. Son los conocidos en muchos países como  los “cultivos sin suelo”, como ya hemos visto en Twenergy en alguna ocasión.

La importancia de los alimentos importados

Aparte de la importancia para la calidad atmosférica, la escasez de combustibles fósiles y su implicación en el cambio climático, la importación de alimentos acarrea otros problemas:
- Riesgo para la salud. Para que los alimentos no sufran problemas de conservación en su desplazamiento son tratados con tratamientos físicos o químicos. Esto conlleva, en algunos casos, a la pérdida de vitaminas y otros nutrientes. Hay que tener en cuenta también la normativa de cada país de procedencia. Los controles sanitarios cambian de unos países a otros. AsiaInspection denuncia casos de contaminación en distintos tipos de alimentos procedentes de China.
-  Sabor de los alimentos. Muchos alimentos importados pierden su sabor o bien no logran el grado de maduración suficiente. Las frutas, por ejemplo, vienen sin madurar para aumentar su durabilidad.
- Pérdida de empleo rural. Cuando se elige lo de fuera frente a lo local se reduce la productividad local y las posibilidades de supervivencia de los negocios rurales nacionales.
Comprar alimentos de fuera tiene muchos inconvenientes que pueden ser evitados fijándonos en laetiqueta del producto. Toda etiqueta debe de indicar la procedencia de fabricación y/o envasado del producto. Aprende a hacer la compra de forma ecológica y elige siempre que puedas productos locales.

Llega el primer shopping argentino construido con containers marítimos

¿Qué es Quo Container Center? Nada menos que 57 containers marítimos de 12 metros de largo reciclados en, y acá viene la gran novedad, ¡un shopping! Está ubicado en la localidad de Ingeniero Maschwitz, en el km 44 de la ruta Panamericana (Escobar) y es obra de la arquitecta Cecilia Bertezzolo que reparte los 2.200 metros cuadrados de superficie cubierta a lo largo de tres plantas con tres módulos instalados en forma vertical.
quo container cityEl proyecto requiere, claro está, de unreacondicionamiento de los containers, que no se limita a su paso por un taller de pintura y su redecoración, sino también a su completo acondicionamiento térmico y posterior instalación eléctrica y sanitaria. El diseño del shopping, que albergará 34 locales (ocho de los cuales será bares y restaurantes) no ha descuidado ningún detalle como, por ejemplo, el ascensor.
Toda la obra, con una inversión de 2,5 millones de dólares, es un homenaje a la sustentabilidad puesto que, incluso las pasarelas metálicas que comunican los containers, cuentan con piso de madera sintética de plástico recuperado.
Y si novedoso es el reciclado de esta obra, no se quedan cortos los 300 metros cuadrados de techos verdes que cubrirán el centro comercial. Se trata de carpetas de césped y plantas variadas que ayudan a reducir la contaminación del aire y el calor,  absorbiendo partículas y gases contaminantes y generando oxígeno.
No es la única aportación sustentable que Bertezzolo ha incluido en su diseño, puesto que Quo Container Center también dispone de su propia planta de tratamientos de efluentes, paneles fotovoltaicos que cubrirán la iluminación de las áreas comunes y la utilización de luminarias LED para reducir el consumo energético.
Aunque es cierto que existen frenos a este tipo de construcciones, como es el caso de la legislación cuyos códigos de edificación no las contemplan (tampoco las prohíben), los beneficios ambientales y económicos son inmediatos, pues se reduce drásticamente el plazo de obra y, además, concientiza sobre el uso de los recursos naturales.
En este sentido, la iniciativa se enmarca dentro de la tendencia bautizada como "container architecture" que precisamente sigue la máxima de optimizar el uso de recursos naturales y minimizar el impacto ambiental sobre el entorno. Ya cuenta con referencias en todo el mundo, como la "Container City" de Londres, el Proyecto Keetwonen de Amsterdam o los 250 metros cuadrados de shopping de San Pablo (Brasil). Una tendencia que, como asegura la propia arquitecta de Quo Container Center “está llegando para quedarse. Cada vez son más los clientes conscientes de sus beneficios”.
Fuentes: Quo | La Voz | Mdzol | Clarin | Flickr